Especial
ANTIOQUIA
San Pascual estrena colegio después de 27 años de espera
El camino al corregimiento San Pascual no se anda ligero. Desde Medellín son cuatro horas de curvas hasta Cañasgordas, y de ahí una hora más por trocha que se despeña entre montañas húmedas, siempre verdes y tupidas. En esas lomas nació y creció Deisy Góez Durango, la joven que alguna vez soñó graduarse en el colegio del caserío. Alcanzó a llegar a noveno, pero en 1998 la tierra se vino abajo: un deslave sepultó medio plantel y la ilusión entera de los estudiantes. Desde entonces, San Pascual aprendió a vivir con la promesa incumplida de un nuevo colegio.
